La biblioteca escaparate

La exagerada demanda de viviendas vinculada al reciente “boom inmobiliario” ha generado crecimientos masivos de viviendas en zonas hasta hace poco deshabitadas. Este es el caso del barrio de Mesoiro, donde la construcción de 4.000 viviendas ha desbordado las previsiones generando una total ausencia de equipamientos.

El proyecto nace de la ordenación de una bolsa de suelo de 50.000 m2 para la colocación de un centro de salud, una guardería, un polideportivo, un centro social y una biblioteca. Siendo este último equipamiento el que se desarrolle en su totalidad.


El fuerte desnivel del terreno y la agresividad de los bordes son los condicionantes principales, el edificio asume este desnivel por medio de una rampa que articula todas las estancias, al tiempo que se va doblando hasta girar sobre sí misma cerrando las vistas hacia el patio interior y protegiéndose del esterior con una fachada perforada metálica.


La rampa se convierte en el motivo principal del proyecto, se ensancha y estrecha propiciando en ella la parada del usuario mientras se abren hacia él los contenidos propios de cada espacio, este paseo interior funciona a modo de escaparate con estanterías que llaman la atención al tiempo que separan las circulaciones de las estancias.


Desde el acceso en planta alta aparecen conexiones directas con los tres grandes bloques, administración, biblioteca y actividades comunes. Los espacios se van disponiendo desde el inicio de la rampa en un gradiente de menor a mayor privacidad y necesidad de silencio.

Las zonas de actividades comunes se disponen en la planta baja, a ellas se puede acceder a través de la promenade de la rampa o directamente por medio de las escaleras. Un segundo acceso inferior permite usar la sala común con independencia del resto de la instalación dándole mayor versatilidad.